lunes, 14 de abril de 2014

LAS COSAS QUE NO ENTIENDO


Por: El Huatusqueño

Un DESENCUENTRO tuvo un servidor hace unos meses con algunos seudo maestros en el parque 21 de mayo, quienes en medio de su protesta contra la Reforma Educativa, liberaron su enojo en contra de quienes encontraron a su paso. Lo curioso es que precisamente el reportero se encontraba ahí para participar en una rueda de prensa y dar a conocer los planteamientos de sus voceros, pero la inexperiencia e intolerancia de algunos maestros que mas parecían orangutanes que pretendían intimidar con su físico, manchó el trabajo de otros. Hoy episodios como ese ya quedaron en el olvido, pues ni el movimiento tiene la fuerza del inicio, ni el campamento tiene razón de ser, desde hace mucho tiempo no se ha visto ningún profesor en la explanada del parque cordobés, así que, si hay congruencia del movimiento magisterial, se deben retirar las carpas que dejaron ahí abandonadas, ya que su lucha alcanzó otros niveles que ya superaron la movilización masiva y la ciudadanía no tiene la culpa que al final, las fuerzas oscuras de los sindicatos de maestros se hayan impuesto sobre la mayoría al grado de que los inconformes fueran doblegados para que  abandonaran el campamento, con un único contratiempo, se les olvidó llevarse su basura…FUGITIVOS se encuentran varios “líderes”, como Tomás Gutiérrez Toral, que de plano abandonó Huatusco, pues ahora se contonea en los altos mundos del Distrito Federal, donde nadie está enterado de que timó a decenas de familias en la zona de Coscomatepec y Huatusco con proyectos de la Sedesol que nunca entregó. Al igual que él, otros han emigrado para no tener que rendir cuentas a nadie, como conocido defraudador que decía trabajar en la Sedesol, pero que después de ser exhibido en los medios de comunicación, sorpresivamente desapareció. El caso de Gutiérrez Toral es peculiar, al ser similar al de  aquellos célebres personajes huatusqueños que cambiaban de partido de acuerdo a sus intereses personales y cuyos rostros, hoy nadie recuerda, a no ser por escándalos de golpizas maritales y shows en la vía pública. A Gutiérrez Toral se le podía ver al lado de priistas, panistas, perredistas o aliancistas, según el caso. Hoy, al parecer se ostenta como auxiliar de un senador de izquierda, quien seguramente ni las manos meterá en su defensa el día que sea denunciado por las muchas personas a las que defraudó…DESAPARECIDOS y ejecutados son el pan nuestro de cada día, aunque ahora no se contabilizan como parte de la estadística de la “guerra” contra el narcotráfico, sino como hechos aislados. En los linderos de la zona cafetalera con Conejos, se siguen encontrando adultos, jóvenes y hasta niños ultimados a tiros. Hace ya más de un año, en Tlaltetela se detectó una barranca, que sirvió como narco fosa y donde fueron hallados más de 25 cadáveres, en diversas fases de descomposición. Una orden venida directamente de los cielos silenció el caso en ese entonces. Lo curioso es que se impuso la versión de que todo era falso, aun antes de publicarse. Actualmente, circular por algunos puntos del estado es aventurarse a entrar un triangulo de las bermudas veracruzano, de donde nadie sale o en el mejor de los casos, las personas van a pie cuando originalmente iban a bordo de vehículos o camionetas de modelo reciente. Las versiones oficiales vuelven a ser que no pasa nada, mientras se multiplican los “rumores” de persecuciones, de balaceras, de vehículos abandonados, que al final, solo generan la psicosis y temor de la gente…UNA REFERENCIA de la reforma energética y sus pequeños desperfectos se pueden apreciar al compararse los jugosos negocios de las empresas mineras. En Guerrero, una minera paga por concesión $704 mil 32 pesos anuales, pero extrae oro por un valor en el mercado de $2 mil 322 millones, es decir, por cada peso entregado al gobierno, las mineras extranjeras se llevan $3.3 millones de pesos, ¿hacemos el ejemplo con barriles de petróleo?, mejor ahí la dejamos o les daré una cruz por demás pesada para cargar en plena Semana Santa. Por ahora es todo. Hasta la próxima.


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