LAS COSAS QUE NO ENTIENDO

Por: Miguel Olvera

CHICUELLAR es un apellido muy conocido y famoso en Huatusco. Agustín Chicuellar lo llevó con orgullo. Fue uno de los principales benefactores de la hoy ciudad, capital de la chicatana y el gato montés. Agustín Chicuellar se destacó por fundar la “Sociedad Agrícola Huatusqueña” que lo delegó para negociar la compra de terrenos para la gente, administró con total transparencia los predios que serían distribuidos entre los pobladores. Tan es así, que datos históricos remarcan que siguió viviendo en la humildad y murió en la pobreza. Es más, se cuenta que aun después de la repartición de predios, después de 1872, se le veía salir con su yunta a trabajar en su parcela. En resumen y para no hacerla cansada, tan importante fue este personaje, que el poblado lleva su nombre “Huatusco de Chicuellar”.

Actualmente, otro Chicuellar quiere destacar en la ciudad, pero buscando literalmente que Huatusco sea suyo, por ejemplo, se habla de un motel (usted quizás ya lo vio) que se construyó en tiempo record frente a Ferche Gas; unas “casitas” edificadas en la colonia Ampliación (a nombre de terceros obvio); un rancho en Tlamatoca, que está a nombre de un conocido médico (hermano del dueño); así como otras propiedades ubicadas cerca del teatro Solleiro que quizás usted ya vio (pista: las anteriores construcciones fueron demolidas) y bueno, ni que decir de la flotilla de Ford, Jeep, Jetta, Honda, vaya, casi todas las marcas conocidas, que en nada se parecen a la yuntita de don Agustín Chicuellar. Por cierto que a menos de 6 meses de dejar la administración pública municipal Santiago Chicuellar Aguilar es visto cada vez con menor frecuencia en su oficina, menos aun atendiendo a la ciudadanía, solo unos tres o cuatro que logran abordarlo en los días de acto cívico (lunes a las 8 de la mañana y de rapidito). En la mayoría de las ocasiones, sostiene reuniones tan importantes que ameritan retirarse de última hora por alguna de las múltiples salidas que tiene el Palacio Municipal, algunas de ellas, para entrevistarse con su nuevo amigo y socio, perdón, aliado de gestiones, Miguel Sedas Castro, con quien fue visto trabajando activamente durante el proceso electoral para aterrizar importantísimos proyectos para la ciudad, uno de los cuales quizás haya sido el endeudamiento de $12 millones para hacer algunas obras, que claro, ejecutará la constructora con la que ambos tienen acuerdos. Y pues, ojalá esas gestiones sí rindan frutos en beneficio de los huatusqueños, porque al parecer, cada salida a la capital del país es como irse de viaje. Por poner un ejemplo, el 27 de enero pasado y de acuerdo al portal de transparencia del Ayuntamiento, tan solo de viáticos, el alcalde gastó con cargo a la tesorería más de $6 mil 900 pesos y eso que fue un solo día, imagínese usted si hubieran sido dos o tres. En contraste, un auxiliar de Sindicatura también acudió a la capital del país pero en el mes de abril y solo se le dieron viáticos por $2 mil pesos, no cabe duda que la diferencia entre jefe y empleado sí existe aunque ambos sean servidores públicos. Y pues para evitar que se vaya usted a confundir de Chicuellar y ande hablando mal de Agustín Chicuellar, benefactor de Huatusco, mejor aquí la dejamos. Hasta la próxima.