Empleados presentan versiones distintas de los hechos
Por: Miguel Olvera Caballero
Zentla, Ver.- Varias líneas de investigación mantiene abiertas la fiscalía de Huatusco para intentar esclarecer el asalto a la gasolinera Arroyo Zarco de Zentla. De inicio los encargados del establecimiento pusieron trabas para acceder a los videos de seguridad, donde deberían aparecer los asaltantes.
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Pie de foto:
Autoridades investigan el asalto a la gasolinera
Arroyo Zarco de Zentla, que ha sido objetivo de
la delincuencia en promedio una vez al año.
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La gasolinera Arroyo Zarco es propiedad del empresario Reynaldo Bernardi Mánica, que en octubre del 2012, fue detenido por elementos de la Secretaría de Marina, a quien le aseguraron en un reten armas y droga.
Ayer Miguel Ángel Fernández, dueño del Tsuru a bordo del cual huyeron los asaltantes, interpuso una denuncia por el robo de su automóvil, en el que se encontraba cargando combustible al momento del atraco.
Este viernes por la mañana rindieron su declaración los empleados que se encontraban despachando gasolina al suscitarse el asalto, pero mientras uno sostenía que portaban armas largas, el otro afirmó que eran pistolas, además que discreparon en el número de asaltantes.
En varias ocasiones ha sido asaltada la gasolinera de Zentla, aunque curiosamente, los atracos se han suscitado casi a finales de año, cuando se avecina el cierre de año fiscal. En promedio el negocio ha sido asaltado una vez al año. En esta ocasión el monto de lo robado asciende a $20 mil pesos.
Fue alrededor de las 21:00 horas que un comando de seis sujetos armados arribó a la gasolinera, donde amagaron a dos despachadores, el velador y una mujer, ingresaron al área de cajas y sustrajeron miles de pesos en efectivo.
Afuera, se encontraba un Tsuru, color rojo con placas YGY-3001 del estado, propiedad de María Magdalena Segura, del ejido La Piña, que robaron los asaltantes y a bordo del cual huyeron.
La tarde de este viernes personal de la fiscalía de Huatusco, así como de la Policía Ministerial se trasladaron a la gasolinera para realizar los peritajes correspondientes y buscar huellas y otros indicios.
Trascendió que en un asalto previo, los delincuentes supuestamente se robaron hasta las cámaras y videos de seguridad, lo que impidió su identificación. Ayer, los encargados del establecimiento argumentaron no tener acceso a esos videos.
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