SURADA DESTROZÓ TEBA DE TENEJAPA

Escuela está hecha de bambú

Por: Miguel Olvera Caballero

Huatusco, Ver.- Desamparados quedaron cientos de estudiantes de la zona de las Altas Montañas, cuyas aulas y otros espacios, quedaron destruidos a causa de la surada registrada esta semana.

Uno de los planteles que sufrió graves daños es el tele bachillerato de la colonia Francisco I Madero, de la localidad de Tenejapa, que al estar construida de bambú y tener techo de lámina, quedó destruida en su totalidad.

Pobladores del lugar y catedráticos refirieron que dos aulas, la cafetería y la bodega, que estaban hechas de este material son inservibles, por lo cual, en los próximos días iniciarán con recursos propios los trabajos de reconstrucción.

Fueron las fuertes rachas de viento, de más de 80 kilómetros por hora, las que arrasaron con la escuela, donde estudian 45 jóvenes, cuya escuela tampoco cuenta con servicio de energía eléctrica. El plantel lo atienden tres profesores de base y uno de educación física a quien los mismos padres le pagan para que los apoye.

Desde hace años, el telebachillerato profesora Acela Servín Murrieta ha solicitado el apoyo de las autoridades, pero ante la indiferencia oficial, emprendieron la construcción de sus espacios con materiales reciclables, sin contar que acaban de implementar un orquideario para preservar las especies de la zona y un vivero de anturios, entre otras estrategias.

La escuela es campeona de Futbol del sector Tebas de Huatusco, así como el tercer lugar en química en las Olimpiadas de la Ciencia de tebas zona Coscomatepec, logros que no se han traducido en la mejora de sus instalaciones por parte de las autoridades educativas, que en esta ocasión, quedaron destruidas.

Los pobladores solicitaron a las autoridades su apoyo, que ofrecieron desde el inicio de la actual administración municipal, pero que hasta ahora no se ha concretado. “Primero nos prometieron el aula, después solo el material, pero no ha llegado, ojalá nos llegue algo”, refirió uno de los afectados.

Por el momento, los alumnos tendrán que refugiarse en las dos aulas con que cuentan, pues el resto del plantel, que fue edificado gracias al esfuerzo e interés de los catedráticos y comunidad en general, quedó reducido a escombros.