Por: Miguel Olvera Caballero
Tlacotepec de Mejía, Ver.- En un oasis para los grafitis se está convirtiendo el municipio de Tlacotepec de Mejía, donde cada día que pasa, aparecen más “pintas”, sin que su alcalde, Gildardo López Melo, haga algo al respecto.
Pie de foto:
Un oasis es Tlacotepec de Mejía para los grafitis,
donde las autoridades no hacen nada para ponerles un alto.
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El municipio desde hace meses también se convirtió en víctima de un grupo de ladrones, quienes a bordo de motocicletas han cometido varios atracos no solo en la cabecera municipal, sino comunidades aledañas.
Aunque están plenamente identificados por la misma ciudadanía, el presidente municipal se mantiene indiferente ante la problemática, pues al parecer, está más interesado en hacer crecer su rancho y obtener más costosos caballos.
La mayor “reacción”, tomada por las autoridades ante este problema, fue la de colocar un anunció en su sitio oficial en internet, informando que “el delito se denomina graffiti ilegal y lo sanciona el artículo 228 bis del Código Penal para el Estado de Veracruz”.
Es en los espacios públicos y algunas viviendas donde se han detectado los grafitis, realizados por los vándalos, cuya detención para aplicarles las sanciones correspondientes, no es una prioridad para el alcalde.
Aunque municipios como Huatusco, Totutla y hasta Comapa cuentan con un mayor número de habitantes y colonias marginadas, es en Tlacotepec de Mejía donde están surgiendo los grafitis, a quienes el alcalde se dio el lujo de informarles simplemente que es un delito sancionado por la ley.
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