Mantiene
castigados a cerca de 100 reclusos
Amatlán
de los Reyes, Ver.- De incurrir en abuso de autoridad acusaron familiares de
internos a José Antonio Ramírez Carmona, director de La Toma quien mantiene
castigados a varios presos desde hace 3 meses, sin contar que convirtió al
penal en su negocio particular.
Familiares
de presos de la zona de Orizaba y Zongolica denunciaron que el funcionario
mantiene a más de 90 presos en condiciones insalubres, infrahumanas, hacinados
y recibiendo visitas condicionadas.
Aunque
el problema ya fue denunciado ante Manuel Antonio Sánchez Hernández, coordinador
regional de los Derechos Humanos en Córdoba, el funcionario niega que existan
presos castigados, problema que ya es un secreto a voces.
El
representante de Derechos Humanos inclusive les dijo a los familiares de los
reclusos que él ya tenía conocimiento de los internos castigados, pero iba a
estar “muy al pendiente para que cuando se cumplieran los 15 días, los internos
iban a ser sacados de ese lugar”, pero hasta el momento no ha regresado al
penal para certificar que no haya nadie en condiciones inadecuadas.
Los
familiares de los internos, que solicitaron mantenerse en el anonimato para no
afectar más a los castigados, afirmaron que el director convirtió al penal en su
tienda, pues controla la ferretería y cualquier cosa que le genere ganancias.
Fue
días después del motín que el director informó a los familiares que sus
internos iban a estar castigados 15 días como una medida de sanción, para lo
cual envió a una licenciada de nombre Dulce Cortés, la cual les dio a firmar un
documento sin darles la oportunidad de leerlo.
Posteriormente,
se conoció que dicho documento era para que los internos “aceptaran” dicho
castigo, pero días después nuevamente Dulce Cortés les llevó a los “castigados”
otro documento sin que tampoco lo pudieran leer “en donde nuestros familiares
aceptan un castigo de tres meses, lo cual constituye un abuso y sin duda alguna
una violación a los derechos humanos, pues todos ellos llevan tres meses y
medio en una celda de dos metros cuadrados en donde conviven hasta 8 reclusos”.
Extraoficialmente
se conoció que familiares de internos ya interpusieron su queja en la ciudad de
México ante la CNDH, y desde aquellas oficinas ya giraron órdenes a la CNDH de
Xalapa para que intervengan y ordenen una investigación, mientras que también
fue denunciado José Antonio Ramírez por abuso de autoridad.
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