ESTUDIAN EN SALONES DE BAMBÚ EN HUATUSCO

Por: Miguel Olvera Caballero

Huatusco, Ver.- En deplorables condiciones reciben clases alumnos del Tebaev de la colonia Francisco I Madero, cuyas instalaciones consisten en aulas hechas con cañas de bambú y láminas que tuvieron que construir los maestros con ayuda de los padres de familia. Miguel Sedas Castro les prometió que les construiría un aula pero no cumplió su promesa con la gente de esta localidad.

Pie de foto:

HUATUSCO, Ver.- En deplorables condiciones estudian los 

alumnos del Tebaev de la colonia Francisco I Madero, 

que se convirtieron en botín político, pero como se puede

 ver, las promesas no se les cumplen.

Desde que se fundó, hace 4 años, el Teba enfrentó la indiferencia de las autoridades locales de la administración 2008-2010, que les edificaron un cuarto que solo tiene capacidad para albergar la dirección. El plantel, a pesar de tener clave de tele bachillerato no cuenta con televisores ni red de energía eléctrica. Otra de las muchas carencias es que el piso de las "instalaciones" sigue siendo de tierra.

Apenas entró Miguel Sedas Castro a la presidencia hace dos años y medio, se reunió con los padres de familia y directivos del plantel, ante quienes se comprometió a dotar a la escuela de instalaciones dignas, pero fue hasta que lo nombraron candidato por Nueva Alianza que "miguelito" se acordó de su promesa y regresó para empezar con los trabajos de construcción de un aula más por presión que por voluntad de hacerlo.

La escuela que dirige Matilde Solís Loyo cuenta con 26 alumnos divididos en segundo, cuarto y sexto semestre, a quienes imparten cátedra 4 maestros que se las ingenian para poder enseñarle a sus pupilos, que solo son vistos por los "suspirantes" como un botín político. Ahora tocó el turno a Juan Carlos Sirgo Martínez, que al visitar el plantel prometió que terminará de edificar la escuela.

Los catedráticos explicaron que apenas hace 4 años se fundó el Tebaev de la colonia Francisco I Madero, que empezó a trabajar en una casa rentada por los tutores. Solo a través de presiones y amenazas, lograron que la entonces alcaldesa, Zaira Ochoa Valdivia les asignara recursos para construir un salón, que fue mal planeado por la Dirección de Obras Públicas, pues sus dimensiones son de una dirección, más que de un aula.